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8 de octubre de 2008

La ciudad iluminada

Miguel Sebastián es, además de amigo del presidente, uno de los pocos ministros de Zapatero que tiene un plan. Y un montón de propuestas. Desde que dejó la oficina económica de Moncloa y ZP le postuló por "decreto" como candidato a la alcaldía de Madrid para batirse con Gallardón ya propugnaba cosas muy "suyas".

Entre sus promesas electorales "estrella" se puede citar la puesta en marcha de una enorme "wifi" municipal para que cualquiera, además de recibir su ración diaria de ondas electromagnéticas, accediera más o menos gratis a internet. A costa de nuestras vidas. Primero se empieza con el uso libre y luego se acaba cobrando cuotas. Así es la vida moderna. Todo el mundo quiere pasarte un recibo más o menos fijo y domiciliado en la cartilla. En realidad, a la vista del desinterés general por la salud propia, no parecía una mala propuesta electoral.

Y como parece que cayó en gracia, tras el chasco de los resultados electorales, fue premiado por Zapatero con un ministerio [así se asegura, pase lo que pase, una buena pensión]; y se le ocurrió su famoso plan de ahorro energético: coche eléctrico o bicicleta, abanico y manga corta. Recoño, quisiéramos ver su casa, su consumo energético y sus vida íntima ecológica...

Sin embargo, la propuesta más llamativa la realizaría hace escasas semanas durante la presentación del plan AvanzaDos, cuando planteó "premiar" a los ayuntamiento que consigan plagar su territorio de antenas de telefonía. Toda una propuesta meritoria contra los ciudadanos de este país. Nos castigan el cuerpo, [nos joden], y para colmo, lo pagamos nosotros mismos, a través de los presupuestos del Estado. Encima de xxxxs -pííii- (¿call girls?) ponemos la cama.

Este ministro será muy listo, pero parece un imprudente. ¡Se ha empeñado en iluminar España! Qué carajo le interesan los ciudadanos, ni el desarrollo tecnológico, ni la madre que nos parió. Quiere alumbrar las ciudades de este país con ondas electromagnéticas para favorecer [presuntamente] a las grandes compañías de telefonía (que no comunicación) y si alguien necesita leer que se ponga bombillas de bajo consumo. Así, de esa manera, incentivamos la manipulación y manufactura del mercurio, uno de los principales venenos que acumulan los seres vivos en los ecosistema marinos y acuáticos y que, por tanto, amenaza a los humanos. Que no decaiga Almadén. Y si las adsl "van" más lentas que una bicicleta de madera, o los españoles "navegan" menos que los europeos, pues nada, así llevamos muchos años, con un barco a pedales. Qué otro remedio tiene el atraso ese que nos carcome, sino poner wifis... ¡Es genial!

Una investigación realizada en Alemania, con una muestra de 280 casas cercanas a antenas mostró una cantidad significativa de personas que habitaban allí desde hacía más de 10 años, empezaron a manifestar dolores de cabeza, irritabilidad, arritmias, trastornos del sueño desde el momento de la instalación de las antenas de telefonía. Qué curioso. Habían iluminado la glándula pineal de los habitantes de esas zonas.

El Ayuntamiento de Getafe, tras las movilizaciones de los vecinos y las pancartas que exhiben los balcones de las viviendas expuestas a la radiación de las antenas ha "intentado" aplacar el miedo de los ciudadanos con una medición permanente que asegura niveles "aceptables" según las recomendaciones de organismos internacionales, generalmente "vendidos", o mejor doblegados, a los intereses comerciales y crematísticos de las grandes compañías telefónicas.

Sin embargo, las mediciones "on-line" que ha puesto en marcha el Ayuntamiento de Getafe no están expuestas de manera transparente a los vecinos como presume el primer edil. Durante el verano sí se pudo consultar; hoy, rebuscando en la web municipal y el blog del alcalde, no se encuentra por ninguna parte. Ni siquiera utilizando el buscador. ¿Lo han eliminado? Según el blog del alcalde, las estaciones de medición se encontraban en la calle Ciempozuelos 2 y en la calle Álvaro de Bazán 43, no sabemos a qué distancia exacta de las antenas; no se aportaba información técnica ni si las estaciones de medición se habían situado en la dirección en la que la emisión es mínima o máxima en función del ángulo en el que emiten las antenas, ni la altura a la que se han situado en relación con los emisores. ¿Nos tomarán por tontos? Eso no vale para casi nada. Sólo recordar que el nivel de emisiones en una de ellas era diez veces superior a la otra y, que los niveles de emisión en esos puntos concretos superaban lo aconsejado por numerosos expertos.

Recientemente la asociación vecinal Vientos del Pueblo ha manifestado la necesidad de una medición independiente en el municipio y que, agregamos nosotros, además de las ubicadas en la calle Ciempozuelos o Álvaro de Bazán, recoja otras antenas situadas al lado de viviendas como la que hay en la Tropic Costa, o la ubicada en el polideportivo del Sector 3, en la Senda de Mafalda, Avenida de las Ciudades, Avenida de España, etcétera, situadas generalmente junto a colegios, institutos y viviendas.

Señor alcalde, aténgase al principio de prevención: evite riesgos para sus administrados, en tanto se desconocen los efectos sanitarios de la radiación de las antenas. Sea un precursor. Aunque sea viejo, y como se dice "pellejo", sus hijos y nietos pueden estar expuestos a la luz electromagnética. Qué actitud tendría si tuviera un familiar con cáncer... y sospechara que se debe a una de esas puñeteras antenas... ¿La quitamos? ¿La quemaríamos? o ¿Luchamos? No ilumine la ciudad. Lo ecológico es apagar las luces mientras los ciudadanos duermen.

Claudio Gómez Perreta, investigador del hospital La Fe de Valencia sobre los efectos de los campos electromagnéticos asegura que "ninguna persona debería vivir a menos de 300 m. de un repetidor de telefonía móvil". Nosotros pensamos que deberían ser 400 metros, además de aumentar esa distancia hasta los 500 metros en el caso de colegios, institutos, residencias u hospitales.

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EN EL ACUARIO DE JUANA

Miércoles, 8 de octubre de 2008
23:44 horas

La rana sigue viva. Las llamadas han sido realmente escasas. No es demasidado importante para el experimento ya quelos móviles, estando "en espera" emiten igualmente suficiente radiación electromagnética como para ser dañina para la salud. Lo importante es la distancia. Juana sigue alejada, en el rincón más apartado del teléfono móvil. Es más que probable que sobreviva a nuestro "martirio". Tenga, pues, precaución cuando utilicen el móvil (es aconsejable el manos libres). Y, por dios, no le regalen móviles a los niños. Todavía pueden llamar a Chichí; hasta el sábado que le daremos la libertad. ¿Dónde hay una buena charca en Getafe para que hibernen y se resguarden del duro invierno mesetario? Teléfono XXXXXXXXXXX.

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1 comentario:

José F dijo...

El ministro sin corbata es mal ministro con o sin corbata.
Pero según tengo entendido es muy buen profesor.

Sus propuestas son absurdas como casi todas las de este gobierno, pero bueno... Eso es harina de otro costal.

Un saludo